El escudo térmico del Starship de SpaceX, fundamental para resistir las altísimas temperaturas de la reentrada, fue puesto a prueba en su décimo vuelo, donde una decoloración naranja levantó dudas sobre posibles daños; sin embargo, Elon Musk confirmó que las placas permanecieron casi intactas y que el color provenía de oxidación y zonas de prueba. Fabricado en acero inoxidable y recubierto con baldosas cerámicas hexagonales, el Starship busca ser completamente reutilizable para misiones hacia la Luna y Marte. Aunque uno de sus motores Raptor falló, el aterrizaje en el océano Índico fue exitoso, lo que demuestra avances importantes en su desarrollo, con la vista puesta en el programa Artemis de la NASA (que prevé llegar al polo sur lunar en 2025) y en un posible viaje tripulado a Marte en 2033.
Miguel Gómez García 2ºM