Expertos en telecomunicaciones y ciberseguridad aclaran el porqué de la lenta recuperación y la inestabilidad de los servicios
Eros Camacho-Ruiz, investigador del Instituto de Microelectrónica de Sevilla (CSIC) explica que la red 5G, de la que se nutren la mayoría de móviles, dependen de un entramado gigantesco de antenas: “Estas antenas (o estaciones base) tienen un soporte auxiliar, como una batería, pero cuando se agotan, ya no hay comunicaciones”.
En España hay unas 60.000 antenas y solo algunas, que están cerca de hospitales o infraestructuras críticas o son nodos importantes, tienen sus propios generadores, que pueden ir rellenándose con combustible si es necesario. El resto tiene una batería que puede durar entre 4 y 6 horas, según la operadora. Este martes, tras el apagón, algunas están apagadas aún y otras no. Por eso el móvil, tanto para llamadas como para tráfico de datos, funciona por zonas y puede desconectarse. “Cuando hay poca corriente hay que dar prioridad a zonas más importantes, porque no se pueden levantar todas las estaciones base de golpe”, explica Claudio Fiandrino, investigador de Imdea Networks.
Vodafone, por ejemplo, decidió apagar su 5G durante el apagón ¿Por qué la recuperación es lenta?
Los datos son como el agua, según aclara Camacho-Ruiz, y hay que volver a distribuirlos poco a poco: “Meter todo a presión puede colapsar el sistema.
Gregorio Rodríguez Zamora 1ºNS Ver mas aquí