La inteligencia artificial ha revolucionado la industria de los videojuegos y la animación, permitiendo narrativas más complejas, personajes realistas y experiencias inmersivas.
En los videojuegos, la IA mejora la inteligencia de los NPCs, genera mundos procedurales y hace que las historias sean más interactivas. En la animación, facilita la automatización de tareas, perfecciona la captura de movimiento y crea personajes hiperrealistas.
Ejemplos como Red Dead Redemption 2, Spider-Man: Across the Spider-Verse y League of Legends muestran el impacto de la IA en estas industrias. Sin embargo, también plantea desafíos éticos, como la posible pérdida de empleos, sesgos en los algoritmos y dudas sobre la propiedad intelectual.
Miguel Gómez García 1ºL