El uso constante que hacemos del smartphone hace que prácticamente todos los días tengamos que cargarlo, y sobre todo con los modelos con los que llevamos más tiempo es probable que muchas veces notemos que nuestro dispositivo se calienta mientras lo estamos cargando.
Lo cierto es que es algo normal, ya que al cargarlo parte de la energía que se está generando se disipa en forma de calor, pero si este calor se vuelve incómodo y vemos que cada vez que cargamos el teléfono este se calienta demasiado, ahí debemos preocuparnos más. Un exceso de calor puede tener consecuencias graves primero sobre nuestro móvil y cargador acortando su vida útil, e incluso en los casos más graves puede acabar provocando un sobrecalentamiento que podría desencadenar en un incendio.
